Junio de 1972
Eran tiempos difíciles para los dibujantes. Pocos lugares donde publicar, pero como siempre fuímos cabezas duras, abríamos brechas en el desierto y cualquier papel era rápidamente dibujado. Pero ni nos conocíamos siquiera, salvo por las firmas en nuestros dibujos. Y en ese Montevideo tan lejano y ajeno, apareció un buen hombre, generoso a más no poder que quiso juntarnos a todos y luego trató de reunirnos bajo una asociación, tarea ímproba para orejanos como somos los dibujantes uruguayos, que estamos mejor solos que bien acompañados, rumiando nuestros sinsabores.
Aquél hombre fue Celmar Poumé, un enamorado del trazo de Fred Harman- el dibujante de Red Ryder-, y que había publicado su personaje vaquero, en un par de revistas de historietas que dejaron un tendal de deudas,a fines del 60.
En la foto se ven de izquierda a derecha: a Sergio Bóffano, director de Charoná, Carlos M. Federici, escritor y dibujante: en aquel año resonaba su tira "Barry Coal" y ya tenía dibujada la splash page de "Dinkenstein"; el único de lentes soy yo, que tenía poco tiempo como profesional en El Día; a mi lado Angel Umpiérrez creador de la tira don Cristóbal y el cartoon "Las 7 semejanzas" , el recordado Celmar Poumé al centro, a su lado el genial José Rivera, Pedro Cano, y Leonardo Galeandro, que nos había hecho los retratos a todos y lucieron junto a nuestras obras.
Angel Rueco que dibujaba "Carozo y Semilla" para la revista Charoná y un joven principiante que ya tenía un super héroe: "El Poderoso Halcón" en El Día de los Niños: Eduardo Barreto.
Años después, Celmar hizo otra muestra en "El Anglo", pero solo con dibujos de José Lupinacci, de Umpiérrez, de él y de su hijo y dibujos míos. La vida no le permitió seguir juntándonos y se fue con sus sueños, joven aun.Gracias, querido Celmar por lo que hicistes por tus colegas y amigos.